Espontaneismo.
Las normas morales no son otra cosa que la expresión de la
voluntad de poder de los hombres. No existe una guía impersonal para la acción del hombre, cada uno
decide quien quiere ser. El principal hincapié se basa en las motivaciones psicológicas, estas son las que
mueven a las personas a postular los valores morales, así entonces las bases reales de la moral eran para
Nietzsche fabricadas por el instinto de poder que tiene el hombre y su tendencia a ejercer el dominio, todo
lo que hace tiene ese fin, dominar, incluso plantea que los postulados racionales son en realidad una
fachada tras la cual no hay nada más que voluntad de poder.
